Lo bueno del día

Bueno, aparte de salir último en la carrera, tener cero puntos después de cuatro pruebas y no haber podido hacer una partida decente desde el segundo día... no todo podía ser tan malo.
Resulta que después de aterrizar, mientras estábamos preparando el planeador para mañana, en derrepente veo aparecer al presidente del club de Sisteron adivinen con quien... ¡¡con la señora del potrero donde aterricé el segundo día!!! Si, esa, la que me retó como media hora, me iba a denunciar a la policía y a cobrar el seguro.
Ella estaba muy sonriente conversando cuando me acerqué a saludar. El presidente del club le estaba mostrando las instalaciones y le explicaba como funciona el club, los planeadores, etc.
Cuando la saludo me cuenta que ella se había contactado con el club, que le habían explicado sobre el campeonato y que en realidad ¡me quería dar una disculpa! Requete plop!
Muy emocionado yo, le dije que no era necesario y que entendía su posición y muchas gracias y bla, bla, bla.
Bueno, cuento corto, me mostró unos volantes de una empresa de sus amigos chilenos (el clásico "ellos viven en Chile, a lo mejor los conoces..."). Yo la dejé invitada a volar planeador cuando vaya a Chile y quedamos de los más amiguis.
Realmente una muy agradable sorpresa para terminar un día que hasta el momento iba pésimo... ;-)